¿Cómo influye nuestra apariencia en nuestros pacientes?
Según Hipócrates, “el médico debe mantenerse limpio, vestirse correctamente y ungido por aromas agradables”, por lo que la apariencia es importante y es lo que distingue al médico del resto de profesionales en ciertos países.
Algunos médicos utilizan vestimentas más informales, pero de una impecable presentación personal. Claro está que también va a depender de los diferentes rangos que ocupa el profesional de medicina, se distinguirá la diferencia asalariada del mismo, cuando es un médico general se distingue de los médicos cirujanos tanto en la vestimenta personal como la que obedece a la del consultorio y la indumentaria tiende a ser más funcional o en la mayoría de casos estándar, pero siempre distinta del ciudadano de la calle.
La ropa de los médicos parece estar regulada por normas de higiene y seguridad, esto requiere de ciertos acuerdos a la hora de realizar operaciones quirúrgicas o consultas, por ejemplo, el uso de accesorios puede llevar a la propagación de patógenos, lo cual es muy importante. E ir de la mano de la buena salud que deben promover.
Por tal motivo, se cuida la apariencia no solo en el vestir sino en el aspecto, recuerde que en nuestro país educamos con el ejemplo, al encontrarnos con una persona de aspecto poco o nada atlético, descuidado, limpio, etc; resulta complicado convencer a un paciente que no fume si fumas, o que haga ejercicio si su apariencia es totalmente sedentaria…
El concepto de imagen corporal es una construcción teórica muy utilizada en el ámbito de la psicología, la psiquiatría, la medicina en general o incluso la sociología.
La imagen corporal influye en el procesamiento de información, la percepción del mundo está influenciada por la forma en que nos sentimos y pensamos sobre nuestro cuerpo.
Dentro de ciertas particularidades vemos médicos que poseen unas determinadas características físicas no opcionales que marcan la primera impresión de sus pacientes. Por ejemplo, el sexo, una determinada constitución o unos rasgos faciales concretos. Contribuyen a la opinión de los pacientes y se consolidan como grandes referentes en ellos.
Y es que todos hemos vivido la experiencia de ir a una consulta y fijarnos en cada detalle de la persona que está atendiendo la consulta y juzgar su profesionalismo no solo con su trato, con sus saberes sino además con su apariencia, vestimenta, estilo de peinado, tono de voz, y salir “enamorados” de todo esto y decir “¡Qué médico!” o por el contrario “decepcionados” y encontrar motivos para hacer comentarios sobre su aspecto.
Fuente: https://www.saludiario.com/nuestra-apariencia-como-influye-en-los-pacientes/